Según la Seguridad Social, Navarra ha incorporado un total de 2.176 nuevos autónomos en los últimos 5 años, al pasar de los 45.325 en 2012 a los 47.501 el pasado octubre.

Los trabajadores autónomos han experimentado crecimientos consecutivos desde ese año, aunque en 2017 el aumento ha sido muy leve, tendencia que se puede deber a que el incremento de asalariados ha restado la inserción de trabajadores por cuenta propia que se dan de alta por necesidad.

Entre octubre de 2016 y 2017, la Comunidad ha sumado casi 22.700 nuevos cotizantes por cuenta ajena; en cambio, solo 51 autónomos más (esta cifra sale de restar el número de altas al de bajas como afiliados por cuenta propia).

La pasada semana el Gobierno foral dio respuesta afirmativa al Plan de Apoyo al Trabajo Autónomo hasta 2020, cuyo borrador se presentó hace un año. Ahora se ha aprobado tras un proceso participativo con las entidades asociativas intersectoriales representativas del colectivo en la Comunidad: CEAT, UPTA, ATA y TRADE, con el visto bueno del Consejo Navarro del Trabajo Autónomo, órgano de participación institucional que representa a todos los autónomos de la Comunidad.

El documento se ha puesto en marcha esta semana, pero algunas de sus medidas comenzaron a aplicarse este año, entre las que destaca el millón de euros destinado a apoyar la iniciación de la actividad como autónomo.

En tan solo seis meses se ha agotado el millón que se había presupuestado. De esta forma, ante el número de expedientes que el SNE-NL debe atender, ha ampliado la partida en un millón más para otras 432 personas entre julio y diciembre. Al concluir el año, unos 850 nuevos autónomos de “perfiles muy variados”, indican fuentes oficiales, se habrán beneficiado de esta medida a través de los dos millones de euros.

Esta ayuda a fondo perdido fue modificada en 2016 con varias novedades para adecuarlas al perfil de emprendedores en Navarra: pequeños autónomos y autónomas, en general. La subvención oscila entre los 2.000 y los 3.500 euros según el colectivo -menores de 30 años, personas paradas de larga duración, víctimas de violencia de género, etc.- y únicamente se exige que la actividad del negocio se prolongue, por lo menos, durante 18 meses. En el caso de que la actividad haya tenido que cerrar antes de cumplir el año y medio desde su creación, la persona autónoma debe devolver dicha subvención. “El porcentaje de autónomos que se encuentran en esta situación es muy bajo”, comentan fuentes oficiales. El SNE-NL ha reservado para 2018 una partida de 1,2 millones de euros para este fin, un 20% más que la inicial de este año que contemplaba un millón.

Además, a través de este plan de apoyo, el Ejecutivo trabaja en otro tipo de medidas como crear una base de locales vacíos, tanto municipales como propiedad de Nasuvinsa, para poner a disposición de este colectivo.

También se están estudiando actuaciones de apoyo al relevo generacional, la implantación de ayudas para favorecer la conciliación de la vida laboral, personal y familiar y el análisis de las condiciones de aparcamiento para los comerciantes.

El Consejo Navarro del Trabajo Autónomo seguirá y evaluará la ejecución de este plan de apoyo que por primer vez se elabora y aprueba en la Comunidad. A través de él se han establecido tres objetivos: fomentar y promocionar el trabajo autónomo como fórmula de creación de empleo, reducir trámites administrativos y estimular la aparición de nuevos proyectos de autoempleo y apoyo a la contratación: crear condiciones favorables para consolidar el trabajo autónomo; y mejorar su visibilidad en Navarra.

Para alcanzar estas metas se han diseñado ocho líneas estratégicas: fomentar las competencias de las personas trabajadoras pertenecientes a este colectivo: perfeccionar los servicios administrativos; impulsar la cultura emprendedora; consolidar el trabajo autónomo; acciones sobre mujeres emprendedoras y autónomas; prevención de riesgos y salud laboral; protección social y saber cómo actuar ante el fracaso; y progresar en el posicionamiento del colectivo.

FUENTES: NOTICIAS DE NAVARRA