Junto con la aprobación de la ley de reforma del autónomo llegaron muchas medidas que se pedían a gratis desde este sector, como la ampliación de la tarifa plana, o las bonificaciones de cotizaciones por contratar a familiares, se solicitaba desde hace tiempo que se aplicaran cuotas más baratas para todos aquellos discapacitados que se lanzaran a sumergirse en el mundo del emprendimiento.

Después de las últimas modificaciones legislativas de La Ley de Emprendedores y la Ley de Fomento del Trabajo Autónomo, todos aquellos discapacitados que tengan un grado de discapacidad igual o superior al 33% podrán disfrutar de varios privilegios gracias a a la aprobación de esta medida como algo imprescindible:

Para los autónomos con este grado de discapacidad, la tarifa plana de la que disfrutan el resto de autónomos tendrá varias modificaciones para ellos; en primer lugar, durante el primer año podrán disfrutar de una reducción del 80% de la cuota, con la que con las bases y tipos de 2017, la cuota mensual se les queda a 50 euros exactos, y esto se hace desde el 10 de octubre de 2015. El cambio es que antes sólo se hacía durante los primeros seis meses, mientras que ahora se ha alargado al año natural, aunque es cierto que antes los autónomos discapacitados menores de 35 años, que ya disfrutaban de todo el año del pago del 80% de la reducción de la cuota.

Y en segundo lugar, y continuando de forma progresiva con la reducción de esta cuota desde el mes número trece hasta el 60, se pagaría, durante 54 meses exactamente, una reducción del 50% en la cuota, por lo que durante estos meses esta parte de los autónomos a partir de este año deberán pagar únicamente 133,52 euros.

Los requisitos que se deberán cumplir para poder acceder a estos beneficios serán que NO podrás haber estado dado de alta como autónomo los cinco años anteriores. Este sería el único requisito, ya que desde el 2015, concretamente, desde el 10 de octubre, ya no hace falta que no tengas personal contratado, y hasta entonces limitaba la bonificación al 50%.

Anteriormente los autónomos con discapacidad podían disfrutar de la reducción de la cuota del 50%, durante los 5 años siguientes desde la fecha de alta en el régimen, pero ahora la reducción del 80% de la misma supondrá un gran apoyo para todos los emprendedores que padezcan algún tipo de discapacidad.