Las jornadas consideradas a tiempo parcial, tiene una apreciación diferente a efectos del cálculo de las cotizaciones sociales.

Hasta el pasado 2013, el cómputo se hacía teniendo en cuanta las horas trabajadas, incluyendo así, las ordinarias y las complementarias, del RDL 11/2013.

Este tipo de trabajadores, han igualado sus derechos con los trabajadores a tiempo completo a efectos de cómputo de sus cotizaciones.

Este nuevo cálculo, está basado en el coeficiente de «coeficiente de parcialidad y «coeficiente global de parcialidad».

A partir de estos, se determinan los periodos de cotización necesarios para acceder a las prestaciones de jubilación, incapacidad permanente, muerte y supervivencia, incapacidad temporal, maternidad y paternidad.

Para poder realizar los cálculos sobre estos periodos, los pasos a seguir son:

1. Calcular primero el periodo de tiempo en el que el trabajador ha estado dado de alta con este tipo de contrato.
2. Tras realizar el primer paso, se calcula el porcentaje que supone la jornada a tiempo parcial hecha con respecto a la que hubiera correspondido a jornada completa. Esto nos dará un número llamado coeficiente de parcialidad.
3. Este coeficiente se aplica sobre el periodo de alta con contrato a tiempo parcial. Da como resultado el número de días que se consideran cotizados en cada periodo de una forma efectiva.
4. A este número de días se le suman los días cotizados a tiempo completo y nos da el resultado del total de días de cotización acreditados computables de cara al acceso a las prestaciones.
5. Con este número de días de cotización acreditados, se calcula el coeficiente global de parcialidad. Esto significa, el porcentaje que representa el número de días trabajados y acreditados como cotizados, sobre el total de días en al alto en la vida laboral del trabajador.
6. El período mínimo de cotización exigido a los trabajadores a tiempo parcial, es el resultado de aplicar al período regulado con carácter general el coeficiente global de parcialidad.