Los autónomos con la prestación por cese de actividad deberán acreditar la caída de sus ingresos en un 75%. Sin embargo, muchos no podrán justificarlo.

Desde principios de mes, los autónomos que hayan presenciado unas fuertes caídas en sus ingresos, pueden solicitar, de nuevo, la prestación por cese de actividad. Ésta durará hasta el 30 de septiembre.

Sin embargo, es necesario que los trabajadores por cuenta propia acrediten que sus ingresos han caído en un 75%. Además, sus rendimientos netos han de ser, también, inferiores a 5.818,75 euros. Por ello, quedarán exentos de pagar la mayor parte de su cuota de Seguridad Social. 

El problema radica en que esta solicitud ha de hacerse antes de estar completamente seguros de si cumple con los requisitos. Por este motivo, los expertos han alertado de que este proceso es inseguro para el autónomo que lo solicita. Por ello, más adelante tendrá que devolver todo el dinero cobrado de julio a septiembre, más ese porcentaje de cuotas que le devolvió la Seguridad Social.

Problema para acreditar correctamente los ingresos

El autónomos puede solicitar la prestación bajo sus propias previsiones. Sin embargo, el problema viene cuando son las mutuas las que lo verifican. A pesar de que los trabajadores por cuenta propia presenten los modelos previstos en el artículo 9.4 del Real Decreto-ley 24/2020, no reflejarían fielmente todos los ingresos y gastos profesionales.

Si el autónomo se niega a que la mutua acceda a sus datos fiscales, deberá aportar una serie de documentos en los 10 días después de su requerimiento. Éstos serían:

• Copia del modelo 303 de autoliquidación sobre el IVA.
• Copia del modelo 130 correspondiente a la autoliquidación en pago fraccionado sobre el IRPF.
• Si tributan en el IRPF por estimación objetiva, deberán aportar la documentación necesaria.

Sin embargo, según el director del área jurídica de ATA, Carlos Piñero, ni el modelo 303 ni el 130 son válidos para que todos los autónomos puedan demostrar sus ingresos y rendimientos netos. 

Modelo 303

A pesar de que buena parte de los ingresos y gastos están incluidos en este modelo, no todos los autónomos hacen una declaración trimestral ni todos los ingresos y gastos están incluidos en este modelo. Por este motivo, el modelo 303 no sirve para demostrar fielmente la caída de la facturación ni el rendimiento.

Modelo 130

Con este sucede algo parecido, ya que no todos los trabajadores por cuenta propia están obligados a presentarlo a cuenta del IRPF. Sólo han de aportarlos aquellos que realicen actividades económicas, tales como las agrícolas, ganaderas, forestales y pesqueras. De esta manera, calculan su beneficio mediante la estimación directa.

También les sirve a quienes hayan realizado actividades profesionales, cuyo 70% hubiera tenido retención.

Libros de gastos e ingresos

Lo más sencillo y efectivo hubiese sido solicitar los libros de ingresos y gastos del tercer trimestre de 2019 y 2020. 

Finalmente, si los autónomos no cumplieran con los requisitos contarían con 3 opciones:

• Renunciar a la prestación en cualquier momento antes del 31 de agosto.
• Devolverla voluntariamente cuando considere que los ingresos percibidos superarán los umbrales indicados.
• Requerimiento por la mutua.