Tras la reforma de la jubilaciones anticipadas aprobada por el Gobierno, uno de los temas en cuestión es la diferencia entre los perfiles de renta que acceden a la prestación

Tal y como informan los estudios elaborados por los técnicos de la Seguridad Social, los perfiles profesionales más comunes a acceder a la jubilación anticipada  pertenecen a las rentas de la escala media-alta y alta. Este colectivo son los verdaderos beneficiarios del actual esquema de penalizaciones por el acceso a la jubilación anticipada.

En cambio, este tipo de modalidad de jubilación es menos frecuente en donde la rentas, o la pensión prevista, es más reducida. Por lo tanto, de acuerdo a las cifras oficiales de la Seguridad Social, el 33% de las jubilaciones anticipadas voluntarias mantienen unas pensiones de alrededor de 2.100 euros de media.

Pensión máxima de jubilación

En España, la pensión máxima de jubilación se encuentra, actualmente, en los 2.707 euros mensuales. Una vez descontada la retención por IRPF realizada por Hacienda, la prestación resulta en una nómina neta cerca de los 2.200 euros. Esta ultima cifra es la la cuantía que un jubilado percibe en España con la pensión máxima tras el descuento del IRPF, el cual es el más alto para eso tipo de renta, que se sitúa en el 15,8%.

Así pues, alrededor del 33% de los profesionales que acceden a la jubilación anticipada voluntaria, perciben una pensión, después de la ampliación de penalizaciones y coeficientes reductores, que se encuentra cerca de la cuantía máxima limitada por ley.

Es por eso por lo que, los datos muestran la validez de la postura del Ejecutivo respecto a la reforma de las jubilaciones anticipadas, la cual admite el principio de regresividad en el modelo, donde se incentiva a las rentas más altas.

Las rentas más altas son los mayores beneficiarios del modelo

Según datos de la Seguridad Social, en cuanto a las rentas más altas, su penalización sobre la cuantía de la pensión tras los coeficientes reductores se encuentra en el 2%. Esto se debe a que no se aplica la reducción sobre la cuantía de la pensión resultante, si no en todo caso, sobre la base reguladora.

Por lo tanto, como es en el caso de las rentas medias y bajas, la base reguladora es menor y como consecuencia, las reducciones de las pensiones se sitúan en una media del 6,5%.

De esta manera, una de las medidas principales que modificaría la prestación de la renta en el uso de la jubilación anticipada voluntaria, es variar el criterio de aplicación de los coeficientes reductores directamente sobre la cuantía de la pensión resultante, y no sobre la base reguladora.

Como consecuencia, se simplificaría la mitigación de la reducción, y por parte de la Seguridad Social, dejaría de ingresar por la vía de las cotización durante ese periodo hasta 1.150 millones de euros.