El Ejecutivo ha sacado adelante esta ley para evitar que existan empresas en las que haya disparidad de sueldos en función del género.

El ministerio de Trabajo y el ministerio de Igualdad, con sus respectivas ministras a la cabeza, han aprobado el decreto de igualdad retributiva entre hombres y mujeres así como el del desarrollo de planes de igualdad en los centros de trabajo.

El objetivo que persigue el Gobierno es el de erradicar la brecha salarial existente entre hombres y mujeres en un mismo centro de trabajo, tal y como ha afirmado la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz: “A partir de hoy, se acabó que un hombre y una mujer en nuestro país, en nuestras empresas, puedan percibir retribuciones diferentes».

El Real Decreto  pretende facilitar la detección de las desigualdades salariales y para ello se establece un registro salarial en el que cada empresa de más de 50 trabajadores deberá realizar, de forma obligatoria, una auditoría retributiva, separando la información por sexo, clasificación profesional y tipo de retribución.

Así, el Gobierno considera que fija un sistema de valoración objetiva a través del cual se pueden medir las responsabilidades que ejerce cada empleado en su puesto de trabajo y si la retribución va acorde a dichas obligaciones o si se está generando una situación de desigualdad.

Según Díaz, así se asegura el derecho a obtener información veraz sobre la cadena retributiva, lugar en el que se producen las discriminaciones que sufren las mujeres.

Por otro lado, tal y como se establece en el decreto, se plantean reuniones semestrales entre los Ministerios de Trabajo y Economía Social y de Igualdad con agentes sociales para corroborar que la ley está siendo efectiva así como para elaborar guías de buenas prácticas que ayuden a las empresas.

Esta legislación, que incluye a menos de 5.000 empresas de todo el país, otorga un máximo de tres años para que lleven a cabo esta adaptación y realicen la auditoría salarial.

Los planes de igualdad en los centros de trabajo

El decreto concerniente a los planes de igualdad está pensado para que las empresas puedan elaborar un diagnóstico consensuado con los agentes sociales, y cubran todas las partes del proceso: desde la selección de personal, hasta la salida del empleado de la compañía.

El texto, a su vez,  fija el contenido que debe tener la auditoría retributiva, en la que se deben incluir a todos los trabajadores, los cuales deberán quedar registrados.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, considera fundamental que se haya legislado en torno a esta cuestión, ya que la lucha contra la brecha salarial se quedaba en una declaración pública de intenciones que no terminaba de ir más allá, ya que no se ofrecían detalles acerca de cómo podría ser y cómo llevarla a cabo.

Además, Montero cree que en estos momentos de crisis es cuando más necesidad hay de promulgar este tipo de leyes, ya que teme que sean las mujeres las únicas que carguen con todo el peso de la situación actual.