En los últimos meses, el gobierno ha no solo anunciado sino celebrado un nuevo hito: el “máximo histórico”, el récord de afiliaciones al Seguridad Social en España.

Este dato, compartido con fervor en ruedas de prensa y notas institucionales, se presenta como prueba de una economía robusta, de creación de empleo y de gestión eficaz.

Sin embargo, un análisis más detallado muestra que tras ese “récord” hay dos dinámicas poco visibles al gran público: por un lado, el peso del crecimiento demográfico —especialmente gracias a la inmigración— y, por otro, la distorsión generada por el pluriempleo, que suman afiliaciones sin necesariamente implicar nuevos trabajadores.

En este artículo de mundoemprende desgranamos estas ‘sombras’ del dato, explicamos por qué el anuncio es menos contundente de lo que parece, cuáles son sus implicaciones para emprendedores y pymes, y proponemos una mirada crítica con foco liberal.

¿Qué nos dicen los datos y dónde está la trampa?, récord de afiliaciones

El anuncio oficial

Las estadísticas más recientes muestran que la afiliación media a la Seguridad Social superó los 21,6-21,8 millones de cotizantes en determinados meses de 2025, lo que representan nuevos máximos históricos.

Este hecho se ha traducido en titulares como “récord de afiliados” o “mejor cifra de afiliación de la historia”.

Crecimiento demográfico como factor de soporte

Gran parte de ese crecimiento de afiliaciones se correlaciona con un aumento de la población activa, derivado en buena medida de la inmigración.

Por ejemplo, entre finales de 2019 y finales de 2024, España habría incorporado más de 2,2 millones de personas al total de residentes, en su mayoría en edad de trabajar, lo que automáticamente incrementa el número de afiliados.

Así, el “récord” incorpora un volumen demográfico que no necesariamente proviene del empleo generado por políticas domésticas.

El efecto pluriempleo: afiliaciones ≠ personas

Una distorsión clave es que la Seguridad Social computa afiliaciones, no personas.

Es decir: una persona que tiene dos o más trabajos cotizando en paralelo genera múltiples afiliaciones.

Los estudios estiman que el pluriempleo puede aumentar las afiliaciones en más de 800.000 unidades, lo que infla artificialmente el dato de “nuevos afiliados” sin que sean realmente nuevos trabajadores o empleos.

Este fenómeno es especialmente relevante en la hostelería, el comercio o la economía estacional.

Ajustes per cápita y tasa de actividad, récord de afiliaciones

Si bien el total de afiliados crece, al compararlo con la población activa o la tasa de actividad el “récord” pierde brillo.

Por ejemplo, si esa cifra crece gracias a un mayor número de personas en edad de trabajar (por inmigración), el efecto neto en empleo estructural es menor que lo que el titular sugiere.

¿Por qué este fenómeno ahora? Factores estructurales. Récord de afiliaciones

Inmigración y mercado laboral

España ha registrado crecimientos sustantivos en la afiliación de trabajadores extranjeros: en 2024 se sumaron más de 200.000 cotizantes foráneos, lo que contribuye de modo significativo al total.

Esto no es intrinsicamente negativo, pero aclara que parte del “récord” es por volumen de población nueva, no únicamente por creación de empleo entre los residentes.

Pluriempleo, economía de bajos ingresos y flexibilidad laboral

La crisis de costes —vivienda, energía, impuestos— y la precariedad laboral han empujado a cientos de miles de trabajadores a asumir más de un empleo.

Datos muestran que el pluriempleo ronda los 800.000 afiliados extra y que los trabajadores con más de dos empleos han crecido de forma notable.

Esto afecta la calidad del empleo, la productividad y la interpretación del “récord”.

Reformas laborales, estacionalidad y mercado dual

La reforma laboral de 2022-23 impulsó la contratación indefinida, pero también amplificó la temporalidad, la estacionalidad y la microcontratación en sectores como hostelería y comercio.

Esto genera vacíos en la interpretación del dato de afiliación: muchos empleos temporales o parciales cuentan igual en la estadística.

Comunicaciones oficiales y retórica de éxito, récord de afiliaciones

El gobierno ha adoptado una estrategia comunicativa que vincula el récord de afiliados con su gestión política.

Los mensajes, cargados de simbolismo, buscan reforzar legitimidad, pero corren el riesgo de simplificar una realidad compleja.

Cuando se ignoran los matices como pluriempleo o inmigración, el discurso puede distorsionar la percepción pública.

Escenario para emprendedores y pymes: ¿qué puede significar el récord de afiliaciones? 

Interpretación del “récord” de afiliaciones para la empresa

Una microempresa o pyme que lee que “hay más afiliados que nunca” puede pensar que el mercado de trabajo está “retomando fuerza”, lo que es positivo.

Pero si ese aumento se basa en pluriempleo o migración sin integración productiva, la oferta de talento específico o local quizá no mejore tanto como el titular sugiere.

Competencia por talento y calidad del empleo

Si el “récord” incorpora personas trabajando en varios empleos o en empleos precarios, la competencia por talento cualificado para pymes no disminuye.

Las empresas que buscan perfiles especializados o con estabilidad pueden seguir enfrentándose a rigideces, escasez o elevada rotación.

Precios, costes y presión sobre el modelo de negocio

El hecho de que haya más afiliados no siempre significa que haya más calidad de empleo, más horas trabajadas o más productividad.

Para pymes, si los nuevos contratos son temporales, parciales o de baja productividad, el beneficio real es limitado.

El emprendedor debe valorar la “calidad del empleo”, no solo la cifra bruta.

Señales engañosas para la estrategia empresarial

Vincular decisiones de inversión, contratación o expansión únicamente a la cifra récord puede llevar a expectativas equivocadas.

El emprendedor debe profundizar en la composición de esos números: ¿son nuevos trabajadores?, ¿son residentes?, ¿son pluriempleados?, ¿son sectores con valor añadido?

Porque la respuesta condiciona rentabilidad.

Hacia una evaluación más completa: propuestas para medir mejor. Récord de afiliaciones

Afiliación ajustada por persona

Sería deseable que la estadística pública diferenciara entre “afiliaciones” y “personas afiliadas”, para cuantificar congresos de empleo múltiple.

Una métrica depurada permite conocer cuántos trabajadores nuevos reales hay.

Composición por tipo de contrato, horas trabajadas y productividad

Conocer cuántos de esos afiliados trabajan jornada completa, cuántos contratos indefinidos, cuántas horas extra y en qué sectores, ayuda a evaluar la calidad del empleo.

Porque la afiliación bruta no nos dice si el trabajador está en un empleo estable o en múltiples empleos temporales.

Relación entre población activa, inmigración y empleo nativo

Distinguir el crecimiento de la afiliación gracias a inmigración o al empleo de residentes con trayectorias largas es clave para discernir entre creación de valor y mera ampliación de la base de afiliados.

Transparencia y comunicación pública responsable, ¿Récord de afiliaciones?

Las autoridades deben comunicar los datos con reservas y matices.

Celebrar un récord sin explicar que parte puede venir del pluriempleo o la inmigración puede inducir a error a la opinión pública y a los emprendedores.

Conclusión Récord de afiliaciones: gran aplauso, pero ¿y el empleo real?

El nuevo “récord” de afiliados a la Seguridad Social, lejos de ser un simple titular triunfal, es un fenómeno complejo.

Es real en cifras, pero matizado en significado.

Que España tenga más de 21 millones de cotizantes es un dato de importancia.

Pero que gran parte del crecimiento provenga de población migrante, del pluriempleo o de la creación de múltiples empleos por persona convierte ese récord en una victoria ambigua.

Para el espíritu emprendedor, para las pymes y para la economía de valor añadido, lo que importa no es tanto el número bruto de afiliados como la calidad del empleo, la productividad de las horas trabajadas y la capacidad de innovar y crecer.

Celebrar un récord sin revisar sus cimientos es como brindar porque sube el contador sin saber qué hay detrás: quizá mayor actividad, sí; quizá mejora estructural, no.

Desde una óptica liberal, que apuesta por empresas competitivas, trabajadores empoderados y crecimiento sostenible, la interpretación debe ser consciente: sí, el empleo crece —en cifras—; pero no todos los empleos crean valor, y no todas las afiliaciones equivalen a una persona trabajadora única con empleo digno.

Si no se acompaña el aumento con mejoras en productividad, formación, estabilidad contractual y valor añadido, el récord será un logro simbólico, no un paso real hacia una economía más fuerte.

El gobierno puede exhibir sus cifras, pero los emprendedores y los autónomos deben mirar más allá del “récord”: revisar qué significan esos números para su sector, para su talento, para sus mercados.

Porque el que cuenta un millón + uno afiliados puede parecer ganador, pero el que convierte esos afiliados en empleo productivo y empresas con futuro será quien realmente avance.