El sector del comercio electrónico supone el 3,3% de todas las ventas y este 2018 la cifra seguirá creciendo.
A pesar de que la mayor parte de las compras las absorben las grandes empresas, las pymes están ganando espacio en el sector del e-commerce.
El gigante Amazon es el que se lleva la mayor parte de los clientes y el más importante a nivel mundial.
Sin embargo, el comercio de proximidad ha puesto el foco en este sector para despegar sus ventas y atraer clientes de fuera de sus ciudades o localidades de origen.
Así se han afianzado el factor estratégico para las pequeñas y medianas empresas.
Según datos recogidos por Aragón Digital en un informe, «las pymes españolas en el ámbito online son un 25,4% de las pymes de Aragón ya vende a través de Internet».
Una tendencia clara a la digitalización ya que, en 2016, solamente un 12,3% se apuntaban a vender en este canal.
Por ejemplo, los productos electrónicos y las prendas de vestir son los que más adquieren los aragoneses por Internet.
Sin embargo, un gran nicho de mercado también se encuentra en objetos especiales y que no poseen las grandes marcas como Amazon o El Corte Inglés.
Sorprende que, a pesar de que el e-commerce es algo que se haya generalizado hace pocos años, los pequeños establecimientos fueron de los primeros que se lanzaron a vender fuera de las paredes físicas de su comercio.
Según los pequeños comercios, el truco está en convertir la página web en una “tarjeta de visita”.